En sueños.
Erik, por Erik
Quizas sea la musica, quizas la lectura, o seguramente mi obsesion por salir del mundo de la vigilia, como dice Gaiman. Pero seguro que es quizas, o sin quizas la cobardia de permanecer en el. Y huir al mundo onirico lleno de paisajes situados en lo mas profundo de la mente de mi admirado Dali, o pasear entre edificios sin fin salidos de la de mi no menos admirado Gaudi. Lo cierto es que aunque solo sea por unos momentos ya, en mi noche, volvere a ese mundo irrreal donde solo reina Morfeo y la realidad no puede por mas que lo intente, penetrar. Aqui lo extraño, lo irreal, lo esperpentico reina por doquier. Camino por inmensos espacios aparentemente desolados de colores entre amrillos, ocres que sin embargo van hacia el azul en sus extremos, con horizontes que se pierden en la inmensidad de su lejania fundiendo esta tierra con un cielo que es continuacion del mismo color y que va subiendo en azul hasta llegar a un intenso azul oscurisimo ahora, si lleno de miles de lucecitas destelleantes, que en ningun cuadro cabrian, por lo que seria preciso ir mas alla del marco e imaginar. No no imaginar, ver, ver como sigue el paisaje hacia arriba perdiendose al final en un nuevo horizonte que no es tal pues este quedo alla abajo, muy muy abajo. No, no hay relojes blandos, si algun arbol que ya no es tal porque simplemente es un fantasma terriblemente anorexico de algo que en cierto momento si fue, con una sombra larguisima y terriblemente negra solo a veces cortada por una grieta que surca el suelo soso por la falta total de relieve. Me vuelvo por un momento y solo veo el mismo paisaje detras, y por alrededor. Hay un silencio total, no canta pajaro alguno, no sopla viento alguno. Pero es una paz que rompe su silencio, con el grito exagerado de su silencio. El tiempo corre hacia atras. Y en mi cabeza suena una musica que esa, no puedo explicarla qui en estas lineas sin sentido. Esta, si alguien quisiera saber de ella no tendria mas remedio que poner un disco.
Edificios ahora imaginados por Gaudi pero nunca construidos que se pierden en la altura de este mismo paisaje y se confunden con sus colores sin extridencias (¿imposible? quizas, tratandose de Gaudi).
El sol comienza a enrojecer los cristales desde el este, y poco a poco la cordura vuelve a envolverte dolorosamente, desdibujando el paisaje como si la lluvia sobre el lienzo pintado al pastel lo desvaneciese poco a poco dando paso a un bullir de coches, autobuses, personajes corriendo. Fardos de periodicos abandonados junto a kioskos aun inertes.
El dia ha llegado y la cordura (?)
¿Seguro?
Musicas:Jon & Vangelis (Private collection)
P:D.Quizas la unica musica recomendada si se ha de leer este cumulo de sinrazones. Hasta la ultima nota.
1 comentario
Trini -
Gocemos de los instantes de felicidad, que la falta de cordura, nos deja disfrutar.
Un abrazo amigo